20 Ola de Calamidad
Llegamos
justo a tiempo mientras los monstruos de la ola comenzaron a hacer destrozos
dentro de la villa.
Los
aventureros y soldados estacionados ahí apenas eran capaces de defender contra
la masacre de la horda. Ellos eran ampliamente superados en números...
... y la
línea de defensa estaba por ceder.
—Raphtalia, por favor evacúa a los aldeanos. (Naofumi)
—¿Huh?
¿Qué hay de Naofumi-sama? (Raphtalia)
—¡Yo
provocaré al enemigo! (Naofumi)
Me
balancee hacia la línea frontal y golpee mi escudo contra un grupo de monstruos
que parecían langostas.
El sonido
del metal golpeando estaba ahí pero obviamente el daño no.
Pero, fui
capaz de llamar su atención.
Esto era
lo mismo que siempre había hecho con Raphtalia.
—¡Guji!
La colmena
de pequeños monstruos con forma de langostas cargó en mi dirección. Siguiendo,
inmediatamente decidí en mi próximo objetivo: los demonios necrófagos y una
colmena de avispas.
*¡Bang!
¡bang! ¡bang!*
¿Era
gracias a la armadura de bárbaro o al escudo? De cualquier manera, como era de
costumbre, recibía cero daño.
—¿Héroe-sama?
—Ah,
cierto... ¡Ustedes vayan y re organícense mientras yo los contengo! (Naofumi)
Vi muchas
caras conocidas dentro del grupo de la villa Riyuuto.
—¡S- Sí
señor!
Afortunadamente, nadie había sido lastimado fatalmente entre los sobrevivientes
aunque yo era el único en el frente de batalla.
—Que
diablos... (Naofumi)
¿Qué fue
ese pensamiento de justo ahora? Qué desagradable.
Mientras
estaba distraído, los monstruos intentaron noquearme con sus ataques con
garras, colmillos y agujas.
Aunque se
escuchaban los dulces ruidos de impactos, no sentía nada de dolor, solo un poco
de comezón. Pero, el sentirlos arrastrándose por todo mi cuerpo era mucho más
que desagradable.
Por lo
tanto, le di una paliza a los monstruos.
¡WAM!
Maldición,
¿Qué ninguno de los habitantes de este mundo sabía cómo dejar solos a las
personas?
Pero creo
que no se podía evitar ya que estaba pasando la ola de calamidad y todo eso.
—¡A-
Ayuden...!
Atrás de
mí, el propietario de la posada a quien estaba endeudado estaba siendo atacado
por un monstruo.
Justo
antes de que el propietario fuese decapitado por la garra del monstruo, grité:
—¡Escudo
Asalto Aéreo! (Naofumi)
Convoqué
la habilidad y un escudo salvavidas apareció inmediatamente y rescató al
propietario.
Él estaba
sorprendido a la repentina aparición del escudo y miró hacia mí.
—¡Corre!
(Naofumi)
—...Ooh,
gracias.
Después de
inclinarse desde su cintura y decir su gratitud, el propietario dejó la escena
junto con su familia.
—¡Kyaaaaaaaaaa!
El
estereotípico grito ensordecedor.
Era la
escena de la damisela en peligro huyendo de grupo de monstruos en persecución.
Me acerqué
a los alrededores.
—¡Escudo
Prisión! (Naofumi)
Llamé a la
caja de escudos para encerrar y proteger a la damisela.
Con la
repentina aparición de escudos, los monstruos cambiaron a su objetivo a mí.
Eso es
bueno. Vengan aquí, Soy muy delicioso.
Antes de
que el tiempo del Escudo Prisión terminara, atraje a los monstruos alejándolos
y regresé a al frente de batalla.
¡WAM!
¡BAM!
Jaah
jaah...
Mi cuerpo
cada vez se volvía más pesado con el incremento en número de los monstruos.
Entonces,
una lluvia de fuego cayó encima de mí.
Detrás de
la horda de monstruos, podía ver la llegada del escuadrón de caballeros. Los
usuarios de magia entre sus filas estaban disparando su magia, entonces esto
era el origen del fuego.
—¡CHICOS!
¡Aquí hay aliados! (Naofumi)
Aunque,
sólo yo estaba aquí.
Los
monstruos fueron rápidamente incendiados y convertidos en cenizas.
Ya que
había muchos insectos, se quemaron muy bien.
Aparentemente, no solo mi defensa física era muy alta, pero también mi defensa
mágica.
El línea
frontal estaba quemándose con un brillante rojo carmín. Odio comenzó a hervir
en mí mientras cuestionaba el motivo tras el fuego amistoso; ví y me acerqué al
escuadrón de caballeros entre el caos mientras mi manta revoloteaba,
dispersando las llamas.
—Hmf,
entonces ese era el Héroe del Escudo... Él es sorprendentemente resistente.
La persona
que aparecía ser el caballero comandante me tiró una mirada y escupió al piso
mientras decía esas palabras.
Entonces
una sombra se disparó hacia el, blandiendo una espada.
Y con un
gran '¡clang!', el caballero comandante rápidamente desenfundó su espada y
chocó hojas con su atacante.
—¿¡Qué
quieren decir tus acciones contra Naofumi-sama!? ¡Te cortaré en dos dependiendo
de tu respuesta! (Raphtalia)
Raphtalia
declaró con sed de sangre.
—¿Un
compañero del Héroe del Escudo, ja? (Caballero)
—Correcto,
¡soy la espada de Naofumi-sama! ¡No perdonaré ningún acto irrespetuoso!
(Raphtalia)
—... ¿Cómo
osa un demi-humano el intentar hablar al mismo nivel que nosotros los caballeros?
(Caballero)
—Has
abandonado tu deber de proteger a los civiles y atacado a tus propios aliados,
específicamente a Naofumi-sama quien intentaste quemar junto con todos los
monstruos usando tu magia. Por estas razones, ¡Ustedes no están calificados
para ser llamados caballeros! (Raphtalia)
—¿No está
bien ya que él todavía está sano y salvo? (Caballero)
—¡No, no
lo está! (Raphtalia)
Raphtalia
continuó discutiendo apasionadamente con el caballero comandante mientras los
demás comenzaron a rodearla.
—¡Escudo
Prisión! (Naofumi)
—Maldición, bastar- (Caballero)
Encerré a
los caballeros que nos rodeaban con mis escudos y ví fijamente a los caballeros
que trataron de usurpar mi trabajo.
—...¿No
son los verdaderos enemigos los monstruos que se originaron de la ola? ¡No
mezcles tus objetivos! (Naofumi)
Con la
cara llena de cenizas, los caballeros voltearon sus caras al escuchar mi réplica.
—Un Héroe
criminal no tiene el derecho de decir tal basura.
—Oh
vaya... yo estoy bien con lo que sea. ¿Por lo que creo que es seguro decir que
ustedes quieren hacerme su enemigo? (Naofumi)
La línea
frontal estaba brillando con monstruos sacando fuego y estaban arrastrándose en
mi cara, con más y más monstruos de la ola uniéndose a la batalla.
Viéndome
soportar todo eso, las caras de los caballeros se volvió completamente azul.
Después de
todo, yo era el Héroe del Escudo. 'No se metan con este tipo' u otros
pensamientos parecidos estaban presentes.
—Raphtalia, ¿terminaste la evacuación? (Naofumi)
—No... Todavía
no está terminada. Creo que tomará un poco más de tiempo. (Raphtalia)
—Entendido, entonces apresúrate a evacuar a los civiles. (Naofumi)
—Pero...
(Raphtalia)
—Aunque
nuestros aliados hicieron llover fuego sobre mí, ni siquiera dolió ni hizo
cosquillas. Es sólo... dejó un sentimiento como si fuese lamido en los brazos y
piernas. (Naofumi)
Dí unas
palmaditas en el hombro de Raphtalia y seguí viendo a los caballeros.
—...
Definitivamente los mataré, no importa qué tanto tome. Atraeré al peor monstruo
aquí y los abandonaré, por ejemplo, y también con otras cosas divertidas.
(Naofumi)
Mi amenaza
fue eficaz; los caballeros dejaron de conjurar magia y jadearon.
—Entonces
ahora, Raphtalia. Ya comenzó la batalla; hay que mover a los enfermos lejos del
campo de batalla, desechando todo este peso muerto. Vaya, mira eso. En verdad
hay muchos enemigos. Sí, hagamos eso. (Naofumi)
Inesperadamente, ya que los caballeros sólo podían aguantar un poco por sí
solos... debería estar bien el abandonarlos aquí.
—S- ¡Sí!
(Raphtalia)
Siguiendo
mis órdenes, Raphtalia corrió de regreso a la villa.
—¡Mierda!
Creyéndote aunque solo eres un Héroe criminal. (Caballero)
El
caballero comandante gritó hacia mí como un idiota justo cuando la duración del
Escudo Prisión expiraba.
—¿Muy
bien, entonces... quieres morir? (Naofumi)
Los monstruos
comenzaron moverse hacia mí.
Los
idiotas se callan, sabiendo que sucedería si los fuese a abandonar y sólo me
protegía a mí mismo.
Vaya, no
podía encontrar a una persona decente entre todas estas gentes.
Estos
tipos eran de los que creían que no sería capaz de hacer nada más que proteger
ya que no era más que el Héroe del Escudo. ¿Quién diablos ayudaría a los demás
sólo porque sí?
Después,
la limpieza de los monstruos de la ola derrotados fue completada hasta cierto
punto.
Una vez
que había terminado con la evacuación de los civiles, Raphtalia regresó al
frente de batalla, ahí fue cuando comencé mi contra ataque.
Usando al
escuadrón de caballeros como nuestros escudos humanos, terminamos con los
monstruos al atraerlos en nuestra formación semicircular. Y unas pocas horas
habían pasado en un santiamén.
—Muy bien,
creo que es el fin. (Motoyasu)
—Eso
parece, este jefe fue muy sencillo. (Ren)
—Sip, a este
paso, la próxima ola también será muy sencilla. (Itsuki)
Nuestros
bravos héroes que lucharon estaban charlando desde su corazón en la línea
frontal de la batalla; donde el cadáver de una Quimera, el jefe de la ola,
yacía.
Era como
si el trabajo de evacuar a los civiles solo hubiera sido la responsabilidad de
los aventureros y los caballeros...
Aunque ya
había pasado un mes, estas personas todavía pensaban que todo esto no era más
que un juego.
Era una
molestia el ignorar a estos héroes de mierda, pero estaba aliviado por que
logré sobrevivir esta ola.
El color
del cielo era un profundo negro. Aunque solo era cuestión de tiempo antes de
que se pintara de naranja por la puesta del sol.
Con esto,
debería ser capaz de seguir vivo por al menos un mes más.
... Aunque
no recibí nada de daño, eso era probablemente debido a que esta ola era débil:
por ahora. Honestamente no sabía si podía aguantar la siguiente.
Tarde o
temprano no seré capaz de aguantar sus ataques... ¿qué me iría a pasar
entonces?
—Un
trabajo bien hecho, grandes héroes. El rey ha preparado el festín para celebrar
sus logros. Humildemente los invitamos a unirse ya que también estaremos
entregando sus recompensas ahí.
Naturalmente, yo no quería participar. Pero, no tenía dinero. Entonces los
bendeciré con mi presencia. ¡Vamos a partir juntos!
De hecho,
era de esperarse que nos preparen nuestros tributos, unos iguales a nuestros
esfuerzos por cada ola.
500
monedas de plata. Eso era una gran suma de dinero para mi en estos momentos.
—Ah, um...
Los
aldeanos de Riyuuto me vieron y hablaron conmigo.
—¿Qué?
(Naofumi)
—Muchas,
muchas gracias. Todos nosotros estaríamos muertos si no hubieses estado aquí.
—Sería lo
mismo si yo no estuviera por aquí. (Naofumi)
—No.
Otro
aldeano negó mi comentario.
—Fue
gracias a que tú estabas aquí que fuimos capaces de sobrevivir.
—Si
piensas eso, entonces sólo haz lo que quieras. (Naofumi)
—¡Sí!
Los
aldeanos se inclinaron ante mí y regresaron.
Su villa fue
violentamente destruida. Supongo que será un gran problema el reconstruirla más
adelante.
Ellos
apenas expresaron su gratitud a quien les salvó la vida, a quien usualmente
tienen desprecio... que gente tan calculadora.
—¡Naofumi-sama! (Raphtalia)
Después de
la larga batalla, una enlodada, sudorosa y sonriente Raphtalia vino corriendo
hacia mí.
—¡En
verdad lo hicimos! Todos están expresando su gratitud. (Raphtalia)
—... Eso
creo. (Naofumi)
—Con esto,
no habrá nadie que termine como yo. ¡Todo fue gracias a Naofumi-sama!
(Raphtalia)
—...Jaa.
Entonces
es esto lo que llaman la felicidad post-guerra, famosa a través de la historia
en mi lugar de nacimiento; Raphtalia estaba conmovida hasta las lágrimas.
—Yo también...
hice lo mejor. (Raphtalia)
—Cierto,
lo hiciste bien. (Naofumi)
La halagué
mientras acariciaba su cabeza.
Es cierto.
Raphtalia había seguido mis órdenes y peleó devotamente.
Sería una
tontería de mi el evaluar falsamente ese hecho.
—Derroté a
un montón de monstruos. (Raphtalia)
—Ja ja,
eso ciertamente me salvó. (Naofumi)
—Gu je je.
(Raphtalia)
Me sentí
un poco incómodo con Raphtalia, que se estaba riendo tan alegremente así; nos
dirigimos hacia el castillo.
—¡Vaya,
vaya! Como era de esperarse de nuestros Héroes. No puedo contener mi sorpresa
después de ver la diferencia entre los decesos de esta batalla y la anterior.
(Aultcray)
Una vez
que el sol se había puesto y el cielo nocturno se había establecido, el rey
declaró ruidosamente a su grandioso banquete dentro de su castillo.
Hablando
de ello, no tenía idea cuál era la cuenta de casualidades, pero esta vez las
casualidades estaban en los dígitos únicos.
....
Aunque yo no tenía intención de tomar el crédito de eso.
Ni
siquiera sentí que un montón de héroes con músculo por cerebro fueron cargando
para pelear con los monstruos mientras me dejaron detrás para limpiar todo.
Pero
aunque pensé para mí mismo que eventualmente nos dejarán en un pobre estado así
como vamos.
Fuimos
afortunados esta vez, pero quién sabe qué habría pasado si los caballeros no
hubieran llegado a tiempo. Era gracias al reloj de arena que fuimos enviados
cerca de ellos.
Este era
un tema muy pesado...
Pide ayuda
y el auxilio llegará.
Era sobre
la batalla contra la ola.
Movilizar a
los caballeros para acompañarnos cuando fuimos tele transportados por el reloj
de arena era una posibilidad válida.
¿Pero que
no los caballeros fueron dejados atrás justo después de que fuimos tele
transportados la última vez?
¡Debió ser
su actitud! Esas personas no querían reconocerme como un héroe, ¡por eso ellos
no fueron tele transportados!
Pero...
¿Qué no los grupos de esos héroes de mierda también fueron tele transportados?
¿Pero,
cómo diablos?
Este tipo
de desarrollo apestaba si fuese un juego.
... De
todos modos, ¿no estamos en grandes problemas? Esta es la paste donde ellos
bajarán su guardia sólo porque llegó ayuda.
Resumiendo, son cosas complicadas.
Comí mi
porción en una esquina aparentemente apropiada mientras se sostenía el
banquete.
—¡Esto es
un banquete! (Raphtalia)
Raphtalia
veía la montaña de comida que ella normalmente no tenía la oportunidad de comer
con ojos que brillaban como pequeñas estrellas.
—Ve y come
lo que quieras. (Naofumi)
—¡Sí
señor! (Raphtalia)
Usualmente
no le doy mucha comida buena... pero sería sabio el dejar que aquí coma lo que
ella deseaba. Una vez que se llenó, ella sería un mejor bien de guerra.
—Ah...
pero, ganaré peso si como mucho. (Raphtalia)
—Ni
siquiera has alcanzado tu estirón, ¿cierto? (Naofumi)
—Urg...
(Raphtalia)
Por alguna
razón Raphtalia estaba haciendo una expresión de preocupación.
—Esta bien
que comas lo que quieras. (Naofumi)
—¿Naofumi-sama, prefieres a las chicas gordas? (Raphtalia)
—¿Huh?
(Naofumi)
¿Qué
estaba diciendo ella?
—Para
nada. (Naofumi)
Sólo
pensar en mujeres me haría imaginarme a esa perra. Un montón de emociones
desagradables aparecería.
Para
comenzar, esa mujer era una forma de vida que era desagradable de pensar...
—Supongo
que es cierto. Eso es como el Naofumi-sama normal. (Raphtalia)
Dijo ella
como si se diera por vencido en lo que sea que tenga en mente.
—Naofumi-sama,
esto está bueno. (Raphtalia)
—Eso está
bien. (Naofumi)
—Sí.
(Raphtalia)
Hmm... Este
banquete es una pérdida de tiempo. ¿Cuándo obtendré mi recompensa?
Este lugar
era como un bote de basura, sólo ver alrededor hacía que me hierva la sangre.
...
Recordando, era muy posible que esas recompensas sean entregadas mañana.
¿Entonces
esto era un encargo de tontos? No, ya que la comida era buena, dejaré eso
pasar.
¡No es lo
mismo para la gente normal ya que Raphtalia estaba a la mitad de su estirón!
Por nada en el mundo seré un tonto que deje pasar esta oportunidad.
—Me
pregunto si tienen algo como un contenedor para poder llevar comida a casa.
(Naofumi)
Uno
siempre debe de pensar sobre mañana y nunca derrochar dinero.
... Tendré
que preguntarles que me dejen tener el resto y recalentar la comida después.
Cualquier cosa que se pueda considerar comida estará bien.
Entre la
multitud, un enojado Motoyasu estaba empujando, abriéndose paso, dirigiéndose
en nuestra dirección.
En verdad,
¿qué diablos le pasa hoy?
Ya que
parecía ser una molestia mayor, la multitud abrió paso e hizo un camino para
esa basura, Motoyasu, mientras él me veía con un odio intenso.
—¡HEY!
¡NAOFUMI! (Motoyasu)
—... ¿Qué?
(Naofumi)
Se quitó
el guante de una de sus manos y me lo aventó.
Si estaba
en lo correcto, ese tipo quería retarme a un duelo.
La
multitud se estaba moviendo por su declaración.
—¡Ten un
duelo conmigo! (Motoyasu)
—¿De qué
estás hablando? (Naofumi)
¿Su
cerebro se había freído finalmente?
Te
convertirás en un idiota si sigues pensando en juegos todo el día.
Este
maldito héroe de la lanza que cargó a matar al jefe como un loco, ignorando a
todos los inocentes que debió haber estado defendiendo.
—¡Lo sé
todo! ¡Raphtalia-chan sólo estaba junto a ti porque ella es tu esclava!
(Motoyasu)
Él estaba
ardiendo con espíritu de lucha mientras me apuntaba con el dedo y denunciaba.
—¿Hmm?
(Naofumi)
La persona
en cuestión estaba dándose un festín en las delicias apiladas frente a ella.
—¿Y qué?
(Naofumi)
—'¿Y
qué?'...¿¡dices!? ¿¡En verdad dijiste eso!? (Motoyasu)
—Jaaa.
(Naofumi)
¿Que tiene
de malo el poseer un esclavo?
No había
nadie que estaba dispuesto a pelear a mi lado. Por lo que compré y usé un
esclavo.
Y este
país no tenía una prohibición en esclavitud de cualquier modo.
Entonces,
¿Cuál es la razón por la que se molestaba?
—Ella es
mi esclavo. ¿Qué tiene que ver contigo? (Naofumi)
—Es... ¡No
es la esclavitud la que está mal! ¡Es porque somos héroes con diferentes con
diferentes valores éticos, de otro mundo, que las personas aquí, y eso hace que
tus acciones estén mal! (Motoyasu)
—Eso es un
poco tarde... había muchos esclavos allá en nuestro mundo, ¿cierto? (Naofumi)
No sabía
nada acerca del mundo de Motoyasu. Pero era literalmente imposible que la
historia de la humanidad sin la existencia de esclavitud.
Una manera
diferente de interpretarlo sería: miembros de una sociedad eran esclavos de las
grandes corporaciones.
—¿Imperdonable? ¿A caso estás usando tu cabeza? ¡Piensa con ese maldito cerebro
que tienes! (Motoyasu)
Forzando a
otros el seguir tus propias creencias... La mente de este tipo tiene serios
problemas.
—Pero es
una pena que este sea un mundo diferente. Aquí existen los esclavos. ¿Y qué
problema hay que yo los use? (Naofumi)
—¡Bas...
tardo! (Motoyasu)
Apretando
sus dientes, Motoyasu me tiró un golpe.
—¡Ten un
duelo conmigo! ¡Si gano, libera a Raphtalia-chan! (Motoyasu)
—¿Para
empezar, por qué aceptaría este duelo? ¿De todas maneras que gano yo? (Naofumi)
—¡Puedes
hacer lo que quieras con Raphtalia-chan! Justo como ahora. (Motoyasu)
—¿Eres un
tarado? (Naofumi)
Intenté
ignorar a Motoyasu e irme, ya que este duelo no me ofrecía nada.
—He
escuchado la historia de Motoyasu. (Aultcray)
La
emocionada multitud hizo espacio para que pasara el rey.
—He
escuchado que uno de los héroes estaba usando esclavos... aunque solo como un
rumor. Si rechazas la propuesta de Motoyasu-dono entonces yo lo ordeno. ¡Duelo!
(Aultcray)
—Ni
madres. Solo entrega la recompensa de esta ola de una vez. ¡No tengo tiempo
para gastar en un lugar como este! (Naofumi)
El rey
suspiró y tronó sus dedos.
Los
soldados salieron de la nada y comenzaron a rodearme.
Cuando vi
hacia Raphtalia, ella estaba detenida por los soldados.
—¡Naofumi-sama! (Raphtalia)
—... ¿Me
estás amenazando?
Dije
mientras lo estaba observando con toda la fuerza que pude reunir.
Este tipo,
el para nada cree en lo que dije.
Entonces
ese es el caso, no sabía en que me estaba metiendo.
—¡Si estás
en este país entonces mi palabra es absoluta! Si viene a eso, puedo confiscar a
la fuerza al esclavo del Héroe del Escudo. (Aultcray)
—... ¡Tsk!
(Naofumi)
Cosas como
des hacer la maldición puesta en un esclavo, los magos de la corte
probablemente sabrían tales técnicas.
En otras
palabras, para preservar la conexión que tenía con Raphtalia, tenía que pelear.
¡No me
jodan! ¡A penas tuve algo después de comprar este esclavo!
¿De quién
creen que es el dinero que invertí en ella?
—¡Esta
justa no tiene sentido! ¡Yo soy ---- ugh! (Raphtalia)
Una pieza
de tela fue enrollada y metida en la boca de Raphtalia para que no sea capaz de
decir nada.
—El dueño
tiene el poder de fortalecer la maldición de castigo en el individuo afectado.
Por lo tanto, haremos que este esclavo no pueda decir ni una palabra más.
(Aultcray)
—... Sólo
hiciste eso para que tenga que participar en el duelo. (Naofumi)
—¿Que no
te estamos dando un premio si participas? (Aultcray)
—¡Qué! Bastar-
(Naofumi)
—¡Bien,
entonces el duelo tendrá lugar en el jardín del castillo! (Aultcray)
Ese
pendejo por rey interrumpió mi protesta y declaró el lugar del duelo.
¡Mierda!,
¿Que no ven ustedes que yo no tengo poder de ataque? ¡Esta es como una carrera
arreglada!